Aquí estoy...

Como si fuese un discípulo de Borges, amo con derroche los atardeceres, los arrabales, algunos espejos de azogue interior, lo mítico y la desdicha. Me gustaría disfrutar ahora de la sencillez de la Belleza. Pero con sosiego. Aunque mis ojos, en un remedo de Terenci Moix, ya no puedan ver ese puro destello que me deslumbraba, aunque ya nada pueda devolver la hora del esplendor, acaso de lo mío que encuentro en mi Barrio, de la gloria mítica, no voy a afligirme, ni con la infelicidad, porque la belleza siempre perdura en el recuerdo.



sábado, 15 de febrero de 2025

"HAY UN GATO..."

 


Hay un gato que tira de las tramoyas del amanecer, estira con su paso sigiloso, con su cuerpo fibroso, las cuerdas por los tejados del mundo, por tiempos que una vez fueron detenidos del invierno; permitiendo que el día, aún confuso, de un sucio embrionario, se acomode y deshaga el misterio de la realidad, también el de un gato que no volverá a tensar las sogas de la madrugada o yo no lo veré jamás.

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