Aquí estoy...

Como si fuese un discípulo de Borges, amo con derroche los atardeceres, los arrabales, algunos espejos de azogue interior, lo mítico y la desdicha. Me gustaría disfrutar ahora de la sencillez de la Belleza. Pero con sosiego. Aunque mis ojos, en un remedo de Terenci Moix, ya no puedan ver ese puro destello que me deslumbraba, aunque ya nada pueda devolver la hora del esplendor, acaso de lo mío que encuentro en mi Barrio, de la gloria mítica, no voy a afligirme, ni con la infelicidad, porque la belleza siempre perdura en el recuerdo.



sábado, 1 de febrero de 2025

"PP al hilo de Junts"

 Y digo yo:



De vueltas con el "Decreto Ómnibus" (o por ahora "minibus" y aunque sea importante la garantía, el escudo social logrado y de cierta decencia y reivindicación a la vocación y servicio de la política española), el PP, en otro de sus acostumbrados y frívolos retruécanos, de ridículos "donde dije digo, digo Diego", votará a favor de aquello que día arriba, dia abajo, votó en contra del Real Decreto, es decir: votará a favor del regalo de un palacete francés al PNV, ese recogenueces de ETA; votará a favor de medidas que protegen a “okupas”; y votará a favor de subir el IVA encareciendo el precio de los alimentos básicos y de la electricidad...


¿Qué no? ¿Qué el PP no votará en estos momentos a favor de aquello o de los anteriores "argumentos" o mejor cínicas excusas, pues solo fueron "mentirijillas piadosas" para justificarse, para justificar el voto adverso, invenciones puesto que el Decreto en absoluto decia ni un ápice, ni mú de esto, y lo saben, y refrendando su catastrófico desgaste a Sánchez más que al Gobierno de Sánchez y sin importarles un "carajo", un pimiento, un bledo, el interés general de los españoles, su protección y bienestar, su derecho? Si pero no, responden desde el fondo de la caverna, con esa ambigüedad oscura que sólo a ellos convence de idónea, perspicaz, legítima, y como de una fe revelada se tratara, indiscutible y alineada, para todos obligada.


No cuela que el PP después de votar en contra de la subida de las pensiones, día arriba, dia abajo, vote o decida de la noche a la mañana hacerlo a favor y en conciencia y por conciencia (que será una conciencia muy curiosa o mejor confusa, engañosa, la de preocuparse por jubilados y pensionistas hoy, ayer no, mañana quién sabe, ya lo veremos, incomprensible; cuando los hechos, ¡ay, los hechos!, desenmascaran y evidencian cómo desde el 2020 el PP ha votado en contra de cualquier revalorización de las pensiones, y más en su último periodo de Gobierno, en los 8 años de Rajoy presidente hasta que lo echaron por líder de un partido o de una organización corrupta, criminal, y así falló una, dos veces la Justicia, sin crisis que obligaran a ello, ni sanitaria ni económica, ni bélica ni catastrófica, ni nacional ni internacional, esquilmada la hucha de las pensiones por arte de birli birloque, subieron estas, ¡en 8 años!, ni un euro, céntimos), y aluden a una intangible conciencia porque le preocupan los pensionistas, los mayores, afirman, ¿ahora?, ¡ahora! En una cuestión de fe, quizás; en el grado más absoluto, ¡arriba, arriba!, de tomar por tontos a los españoles, seguro; de hacer de su provecho personal un ideal patriótico. Ridículo y ridículos.


¿Entonces? ¿Qué ha sucedido para que el PP vote o vaya a votar a favor, reconvenga su objetivo o estrategia, a casi una treintena de medidas sociales, entre ellas la subida de las pensiones, no de las 3 que exigían basándose en mentiras que de piadosas no tenían nada y por el sufrimiento que infringían a millones de españoles y porque solo les interesaba su cuenta de resultados electoralista y partidista?


Lo único fehaciente, evidente o irrefutable, contrastable, es que el PP ha seguido fielmente la decisión de Junts, ha apoyado sin medias tintas a la decisión de Junts, se ha postergado a Junts con su voto favorable. ¡A Junts, o a Puigdemont sin su eufemismo grupal, a esos pérfidos nacionalistas, asquerosos independentistas que sólo desean destruir España (lo sentimos mucho, Ayuso, ¿sientes?, pues de igual manera al "se iban a morir igual" en la homicida desatención a los ancianos en las residencias de Madrid, esos odiosos separatistas son colegas de antiguo, desde Tarradellas, Pujol, Más, a Puigdemont! Y es que el PP podría abstenerse en la votación, ¿verdad?, en estos gélidos instantes en los que vuelve a quedarse solo, una vez más, sin poder de determinación ni de atención en la política nacional, comparsa, charanga, un cero a la izquierda, precisamente; pero no, vota a favor por sumisión al criterio marcado por Puigdemont o su eufemístico Junts.


Un nuevo capitulo en la historia del ridículo pseudopolítico español. ¡Feijóo, quédate, por favor!, de "fanático sanchista" a fanático ilustrado de bobada y carcoma. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario